Al hablar de "dramas domésticos", la mayoría coincide en que una de las preocupaciones es el tema de la humedad. Más de uno se agarra la cabeza cuando ve aparecer una primera mancha en la pared, pensando en todo lo que implica romper y cambiar caños.
Pero pocos piensan en la consecuencia sobre la salud de tener esa humedad viviendo con nosotros: implica que hay hongos y otros microorganismos. Y claro está que da lugar a situaciones que van desde dolores de cabeza, hasta alergias respiratorias y en la piel.
Entonces ¿qué hacer? Desde Ms Maderas te lo contamos.
En primer lugar, es importante que sepas que para evitar la humedad hay que reconocer dos frentes: puede ser que se origine desde el interior, por ejemplo por una mala aislación, o puede provenir desde el exterior, debido a filtraciones de agua.
Entonces es crucial ocuparse de la envolvente de una vivienda, que incluye techos, paredes y pisos.